A finales de la Década de 1950 el Gobierno gestionó la contratación de unas líneas de crédito con el Estado Español para la financiación de parte de las obras de Corposana y la construcción de buques para la Flota Mercante del Estado, que culminaron satisfactoriamente. Amén de ello, también se suscribe el 25 de Junio de 1959, entre el Gobierno del Paraguay y el Estado Español, un convenio por el cual el primero concedió al segundo, en el puerto de Asunción, un Depósito Franco para el recibo, almacenaje y distribución de mercancías de procedencia y de origen españoles destinadas a su exportación al Paraguay u otros países.