La Cautiva es una tradicional estancia del siglo XIX que posee un casco histórico de 15 hectáreas diseñado por Charles Thays, una casa de estilo francés con 11 amplias habitaciones en suite de excelente categoría, algunas de ellas con balcón y jacuzzi propio, y una caballeriza restaurada como restaurant donde pueden realizarse eventos sociales de distinta índole. En el establecimiento pueden desarrollarse diversas actividades al aire libre como caminatas, paseos en bicicleta, golf, tenis y pileta, entre otras cosas.