El Arte Del Frío
Leiva - Aire Acondicionado - Porteros Electricos
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El Arte Del Frio
Salas Del Once
aire acondicionado
Frente a los calores acudimos a las compras de aires acondicionados, aqui le dejamos unos consejos para su ayuda. Consejos para respirar un aire más limpio y saludable Si padecés de alergia o asma, ya sabeé que respirar aire puro es esencial para tu bienestar. Pero no hace falta sufrir ninguna dolencia para notar los beneficios de un aire exento de impurezas. Afortunadamente, controlar la calidad del aire en un entorno cerrado es más fácil de lo que imaginás. Acá tenés algunos consejos para respirar un aire más limpio. Versión para imprimir Los contaminantes no se ven ni se huelen Cuando uno piensa en la contaminación del aire, enseguida le viene a la mente el humo de la chimenea de una fábrica o del tubo de escape de un auto. Pero el aire contaminado no siempre es aquel que te hace estornudar o te obliga a taparte la nariz con la mano. Normalmente, los alérgenos, virus y bacterias infecciosas acampan a sus anchas sin ser detectados y provocan diversas molestias, desde irritaciones leves hasta enfermedades graves. Antes de ponerte la máscara de oxígeno, te pasamos algunos consejos para mantener el aire limpio en tu casa. Limpieza más efectiva del hogar ¿Tenés la impresión de que tu aspiradora expulsa más suciedad de la que junta? Elegí un modelo que tenga el filtro HEPA. Los filtros HEPA evitan especialmente que el polen, polvo y los alérgenos sean devueltos otra vez al aire. La función de los climatizadores Para mantener el aire limpio no necesitás ningún purificador de aire. Algunos aparatos de aire acondicionado, refrigeradores y calefactores ya vienen con potentes purificadores. Los mismos sistemas que te aseguran el confort, también te ayudan a sanear el aire que respirás. Los climatizadores combaten el moho eliminando el exceso de humedad del aire. Gracias a esto, tanto el climatizador como la habitación permanecen secos y limpios. Filtración por capas Para eliminar todas las impurezas que se encuentran en el aire se necesitan más de un filtro y más de dos. Por ello, el aire que producen no sólo huele a limpio, «está» limpio y no contiene las partículas contaminantes que pueden resultar molestas e incluso dañinas para la salud. Lo importante es que el sistema cuente con modernos filtros capaces de succionar el polvo y las bacterias, algo de lo que carecen los filtros convencionales. Con su gran superficie y alta densidad. Tecnología activa para eliminar las impurezas A diferencia de los filtros pasivos convencionales, el ión S Plasma no espera pacientemente que aparezcan las impurezas, sino que lanza átomos de hidrógeno e iones de oxígeno para rastrear la habitación. Estas partículas son inofensivas para el ser humano y los animales, pero letales para los virus de la gripe, hongos, bacterias, partículas alergénicas y demás impurezas. El resultado es un fuerte efecto esterilizador. Para ser realmente efectivos, los purificadores de aire deben hacer circular el aire por todos los rincones de la sala. Aseguráte de elegir un modelo con un radio de acción suficiente para cubrir todo el lugar y que esté diseñado para hacer circular el aire por todos los rincones. No olvides limpiar el filtro Limpiar el filtro del aire acondicionado no es lo que uno suele tener en mente, pero es esencial. A veces vale la pena comprar un aparato que avise automáticamente cuándo hay que limpiar el filtro. Es la manera de lograr que siga funcionando con total eficacia. Lo fácil es dar por sentado que el aire que respiramos es aire limpio; lo inteligente es preguntarse qué podemos hacer para mejorarlo. Con el producto adecuado y algo de mantenimiento, podés hacer que el aire que respirás vos y tu familia sea mucho más saludable. El acondicionamiento de aire es el proceso que se considera más completo de tratamiento del aire ambiente de los locales habitados; consiste en regular las condiciones en cuanto a la temperatura (calefacción o refrigeración), humedad, limpieza (renovación, filtrado) y el movimiento del aire dentro de los locales. Entre los sistemas de acondicionamiento se cuentan los autónomos y los centralizados. Los primeros producen el calor o el frío y tratan el aire (aunque a menudo no del todo). Los segundos tienen un/unos acondicionador/es que solamente tratan el aire y obtienen la energía térmica (calor o frío) de un sistema centralizado. En este último caso, la producción de calor suele confiarse a calderas que funcionan con combustibles. La de frío a máquinas frigoríficas, que funcionan por compresión o por absorción y llevan el frío producido mediante sistemas de refrigeración.